Claro y Conciso


S- ¡Señor Iudal! ¿Podemos hablar? (TOC TOC TOC!)
M- El amor era... (TOC TOC TOC!)... ... ¡HIJO DE PUTA! ¡MALDITO SARASA CULIPRIETO! ¿¿¿¡¡¡SÍ!!!???
S- Qui... quizá pueda esperar...
M- ¡Sí!
S-... oiga... he he encontrado a Verdel, señor Iudal...
M- ... vaya, pues es un alivio
S-... ¿usted le hizo algo a mi perro?
M- ¿te das cuenta de que yo trabajo en casa?
S- ... emm... no, no lo sabía
M- ¿te gusta que te interrumpan cuando estás mariposeando en tu jardincito?
S- No... no... de hecho le quito el timbre al teléfono y a veces le pongo un cartón encima... y...
M- ¡Pues yo trabajo a todas horas! ¡Así que nunca, nunca me interrumpas! ¿De acuerdo?... Ni aunque haya un incendio, ni siquiera si oyes un golpe seco en mi casa y al cabo de una semana sale de aquí un olor que sólo puede ser el de un cadaver putrefacto y has de llevarte un pañuelo a la cara porque el hedor es tan fuerte que te vas a desmayar... aun así ¡NO LLAMES AQUÍ!... o si es la noche de las elecciones y estás emocionado y quieres celebrarlo porque algún chupapollas con el que sales ha sido elegido el primer presidente marica de los Estados Unidos... y ha decidido que te va a llevar a hacer locuras a Camp David y quieres a alguien con quien compartir ese momento... aun así, ¡NO LLAMES!... a esta puerta NO... ¡No! ¡Bajo ningún concepto!... ¿lo has captado, ricura?

Comentarios

Entradas populares de este blog

"A la vida bona"

Ellos se van, tú te quedas

φοῖνιξ